Felicidad a raudales las que puede
conseguir un payaso en muchas
ocasiones, no hace falta ser niño
para reír, para sentir alegría, para
disfrutar de las pequeñas grandes
cosas que nos ofrece la vida...por
mucho que la madurez me ronde,
por mucho que vaya pasando sobre
mis cada vez mas cansados huesos
el tiempo...por mucho que quiera parar,
por mucho que todo gire a mi alrededor,
no alcanzo a comprender por que
complicamos tantos las cosas,
no quiero crecer, no quiero hacerme
mayor, no quiero dejar olvidado en
cualquier rincón de algún cajón cerrado
con llave la capacidad de sorprenderme,
de sonreír, de ser feliz con tan poca cosa,
esas cosas que a veces nos empeñamos
en complicar en demasía...cuando todo
puede llegar a ser tan fácil como sonreír...
que no es poco...
Por mucho que tus huesos estén cansados y te pesen, soportas unas cargas especiales. Y aunque te cargan y cargan, tu quieres.No se si más, pero quieres. Por eso sonríes, por eso disfrutas, por eso vuelves a sentir la vida en colores, omo los niños.
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