Y suspiro entre silencios, acongojado el entuerto, difuminado el destierro de noches a oscuras en las que tiemblo, no hay verdades ni mentiras, tan solo el reencuentro, una y otra vez con mis centros, de un lado el tiempo, del otro, el desatino de no poder domar el espacio en el que me encuentro y aun suspirando entre silencios, el verso que desquicia mi secreto, es tan valido como aquello que prometo, es tan sencillo como aquello que respeto y mientras sigo suspirando entre silencios, se amontonan en mi cabeza el todo y la nada de lo que malinterpreto...
pd:
No siempre las cosas
son como pensamos....
No hay verdades ni mentiras, pero por encima de todo que no falte el respeto...
ResponderEliminar¡Abrazos y buen fin de semana!
De paseo con la cámara