Por todos esos silencios compartidos, por cada unos de los momentos vividos, por rozar la eternidad acurrucado en tu regazo, por las sombras, por los brillos, por todos los abrazos y todos los besos, por los reflejos que me devuelve el espejo, por tus risas girando a mi alrededor, por las coordenadas al azar y el vuelo eterno de una mirada tras el cristal, por el derecho, por el revés, por cabalgar sobre las olas del mar, por acortar distancias y acercar la voluntad, por los sueños más rocambolescos, por los versos más dicharacheros, por el ancho de mi cielo y el contorno de mis nubes, por capturar las certezas, por ambicionar la verdad del todo y la nada, por los rincones del alma, por la complicidad, por ti, por mí, por la felicidad...