Es extraño, pero pareciera que las musas con su danza de gracia se hubiesen batido en retirada y en su lugar los cuatros jinetes del Apocalipsis cabalgaran sobre mis letras, quisiera buscar en ellas besos que saciaran mi voraz apetito y en cambio solo encuentra caricias arañando el alma. Es extraño, pero los rayos de sol que se filtran por las persianas no encuentran cobijo y si atesoran lagrimas, no se me ocurren sonrisas para los entresijos del cariño que recibo, solo vaivenes escurridizos. Es extraño, pero esa mariposa que revolotea por mis aposentos no engendra piruetas con las que describir lo más bello del amanecer y si la tremebunda parquedad del ser. Es extraño, pero la magia deja de navegar por los brillos orquestados de la sinfonía de los colores, engullendo con oídos sordos las parrafadas gesticuladas a golpe de la batuta mutilada. Es extraño, pero el mar dejo de ser azul y aun así sobre la cresta de sus olas salta la chispa que regenera la osadía de encontrar la pleitesía de saberse con la victoria. Es extraño, pero se emborrona la mirada cuando intenta en caída libre, sobrevolar los alrededores que alborotan la necesidad de brincar aunque ningún musculo consiga activar. Es extraño, pero pareciera que las musas hubiesen olvidado recrear la algarabía de una sonrisa en mi despertar.
De esos días en los que quisieras alcanzar las estrellas y no te acompañan las fuerzas, de cuando te empapas hasta los huesos y no existen nubarrones a los que acusar, de esos días que quisieras olvidar...
Duele leerte, pero hare para ti un sortilegio convencida que la palabra sentenciada con convencimiento y cariño recibe un guiño divino.
ResponderEliminarEntonces conjuro a la ternura, conjuro a todos los vientos y al sol y a las estrellas para que arranque de tu alma la pesadumbre, invoco tu sonrisa franca, el agradecimiento por estar vivo, por saberte querido, del convencimiento que surge de saber que eres un ser humano valioso y sensible capaz de dar y darse, bellamente, y dejo una corona de rosas en tu corazón para que a la par de la belleza recuerdes que las espinas están allí para que ellas puedan mantenerse bellas y vivas, así mismo es la vida, cariño siempre.Acuerdate de la santa de los pequeños caminos, vamos Josh antes de amanecer es cuando mas oscurece, cariño a ti...
Comparto tu día, de esos días que se hacen mís días, espero que tus musas no tarden en llegar, aunque a pesar de su ausencia, estas letras que no logran alcanzar por el momento las estrellas, logran entrar al alma de quienes te leemos.
ResponderEliminarBesos
Cuando los ángeles se olvidan de ti, no te queda más remedio que aprender tú a volar
ResponderEliminarEs extraño...pero consigues escribir textos hermoso aun sin las musas esquivas...será que tu tienes "algo" más que inspiración...un abrazo,Josh
ResponderEliminarNos extraña que te extrañe que extrañes tus Musas cuando nosotros, aun en tu extrañeza, seguimos extrañando tus Letras...
ResponderEliminarSe te extraña siempre, estés extrañado o no;).
No te engañes: hasta tus Musas te extrañan:).
¡¡Sigues siendo GRANDE, coño!!
A veces duelen los silencios pegados al alma,las ganas de volar se hacen imposibles y el corazón es un simple latido de vida.
ResponderEliminarNo te extrañe que todos tengamos días así.
Besos que te animen.
Es extraño que te visiten mariposas y los 4 jinetes y que no tengas algarabía de musas en tus letras, eso es que te lo parece a ti, porque yo veo versos blancos cabalgando sobre fondo negro ¿o no tengo razón? Pues eso... que los nubarrones tampoco son tan negros como los pintan y que tú los huesos los tienes calados de poesía.. Bss, amigo y ánimo de caballería...
ResponderEliminarEs hermoso todo lo que escribes, pero las veces que he entrado a leerte siempre he visto penas y lagrimas a tu alrededor, cuando lei tu escrito me quede muy triste, porque me duele tu dolor, debes de animarte y cambiar todo en tu vida para que asi puedas llegar a sonreir, un abrazo desde la distancia, sos genial
ResponderEliminarHay veces que las musas nos dejan aparcados pero ya volverán. Tu texto es grande, tus musas están contigo.
ResponderEliminarun abrazo
maite
Hay días en que los versos y la vida se tiñen de nada, aún así has sabido plasmar esa sensación de vacío extraordinariamente, poniendo conciencia en dibujar una extraña sensación de incompetencia
ResponderEliminarAbrazos y buen día