CAPRICHO CIEGO

En mis manos, girando a mi alrededor y sin

olvidar las reglas que me guían, podría ser

el capricho ciego mi consejero. Atrapado

como aquel niño descubierto en una

travesura,como el furibundo víctima del

atasco en hora punta, sometido al chantaje

que llena mi entorno de culpa y desolación.

Comenzando de nuevo el juego en el que siempre

ganan los mismos. Derrotas que pueden vencer,

murallas en el camino que obstaculicen el animo,

suscitando todo el cansancio y desaliento del que

quieran cargar la espalda, abortando hasta el

simple deseo de empezar un nuevo camino.

Podría llevar la razón y aun así, negarla como

acto instintivo, podría tener mejores ideas y aun

así seguirían volando a la papelera, podría ser

mejor persona y aun así su raciocinio seria puesto

en duda. Okupa de la vida laboral,queriendo

mantener el privilegio del que paga, ninguna

otra tarjeta de visita que la dictadura de su

opacidad. Podría ser mi jefe, podría ser el tuyo...

Vicios, debilidades, costumbres que aun

creyéndolas extinguidas años atrás, siguen

estando presentes. Pobre asalariado iluso

que todavía no aprendió a ganar...

o quizás a volar.