ESQUINAS REDONDAS

Esta noche como muchas otras

escribo para escapar de mis

propios demonios, intentando

descifrar y pasando a tinta

digital de estas mis cuatro

esquinas, todos y cada uno

de aquellos sentimientos que

van girando a mi alrededor.

Me consta que es una forma

como cualquier otra de escapar

de mi claustrofobico encierro,

a través de las palabras que

mas o menos acertadas puedo

conjugar. Coleccionando letras

que intentan formar palabras para

convertirlas en las frases que

tratan de unirse con algún sentido,

rompiendo las cadenas que me están

permitiendo expresar lo que siento.

Empiezo a encajar piezas del puzzle

de mis constantes vitales, de mi

propia existencia, evitando caer en

la mas absoluta de las locuras. Sigo

aporreando el teclado, mis dedos están

nerviosos, quieren mantenerse ocupados,

para no cerrar el puño, para no golpear,

para no dejar escapar la furia que

concentra mis propias desdichas.