Esperando encontrar
el ritmo endiablado,
la ternura deseada.
El recodo del camino
me obliga a dibujar
susurros sostenidos.
Envuelvo el encuentro
de tiempos enfrentados,
con acentos abreviados.
Un halo de conjeturas
inaugurando caprichosas
las sonrisas gaseosas.
Nostalgia...para que.
si el destino viene
anunciando su camino.
Rendirse a lo evidente
no es ningún aliciente,
es aceptarlo simplemente.
el ritmo endiablado,
la ternura deseada.
El recodo del camino
me obliga a dibujar
susurros sostenidos.
Envuelvo el encuentro
de tiempos enfrentados,
con acentos abreviados.
Un halo de conjeturas
inaugurando caprichosas
las sonrisas gaseosas.
Nostalgia...para que.
si el destino viene
anunciando su camino.
Rendirse a lo evidente
no es ningún aliciente,
es aceptarlo simplemente.
Desde el dolor de una amiga perdida (YO) me traslado a tu entrada... a una entrada también dolorosa... necesito risas... ¡Hasta luego!
ResponderEliminarBss.. Onubius
Y aceptar simplemente es lo que tanto nos cuesta.
ResponderEliminarMil besos de aire puro.
=) HUMO
ole, ole y ole tu escrito. mi enhorabuena chaval (o señor?) saludos
ResponderEliminarRendirse jamás, hermosos versos.
ResponderEliminarBesos
Siempre hay algo por lo que luchar.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Morgana.
Rendirse nunca, como dice medianoche, aceptar la situación si me parece lógico y poner medidas para cambiarla si no nos gusta. Un besazo, todo un placer leerte.
ResponderEliminarummmm, rendirse?? que sea solo una tentación.
ResponderEliminarno permitas que nada empañe tus sueños, un beso muy fuerte
Es parte de todo, el saber aceptar las situaciones que no podamos cambiar, sin embargo, hay que saber diferenciar la delgada línea de lo que debo aceptar y lo que puedo cambiar, tal como lo dice esta pequeña oración: "Señor,
ResponderEliminardame la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, valor para cambiar lo que puedo, y sabiduria para conocer la
diferencia entre ellas".
Abrazos alentadores! =)