Llego la primavera, magistral luce la ciudad, colores de
inconmensurable belleza, flores por aquí, flores por allá, un espectáculo
increíble, aromas que se entremezclan añadiendo a la atmósfera suntuosos ungüentos
que enriquecen todo lo que nos rodea, el azul del cielo atestigua su osadía y
los naranjas en atardeceres y amaneceres recalcan que estamos en la mejor época
del año, los días se vuelven grandes, la noche pequeña y la sonrisa es fácilmente
dibujable en cada uno de los que murmuramos al viento que al final, la
felicidad es lo que cuenta, aun así hay mentiras como en cualquier época del
año, pero y qué, no por ello vamos a dejar de contemplar la belleza de la primavera sobre nuestras cabezas, no hay
que darle mayor importancia a lo que nos hace daño, hay que mirar por encima
del hombro e intentar que no emborronen
el canto de los pájaros, el reflejo del sol en el mar o nuestros paseos bajo
esa luna feliz que se empeña en llegar a la mañana cantando nanas...
Pd: se necesita una sonrisa para florecer...
Esa es la actitud! Un paso estupendo! Me alegro mucho :)
ResponderEliminarSalu2
y sin una sonrisa tanta primavera se siente ajena...
ResponderEliminarbesos!
mi querido poeta "azul",me alegro mucho,que sigas escribiendo, con la piel y la luz...en mi se va apagando poco a poco, cada día descreo mas de mi!
ResponderEliminarabrazos,enormes
lidia-la escriba
www.nuncajamashablamos.blogspot.com te sigo en TW
ah no, no estás en tuiter! mejor! je
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