
A menudo metemos la cabeza
bajo el agua,girando a nuestro
alrededor con ese temor
que caracteriza el posible daño
que nos pueden causar cuando
menos los esperamos, por que
en el fondo, a pesar de nuestra
coraza, somos vulnerables...
Por supuesto que no es la mejor
forma de enfrentarse a todo los
monótonos avatares que día a día
nos regalan con su presencia,
Tampoco seria justo con nosotros
mismos,dejarnos llevar por la
corriente, dejarnos embaucar por
lo que esta bien o esta mal...
Somos nosotros los que decidimos
si esta bien o no...no hay que temer
a la equivocación, hay que aprender
de ella, hay que seguir flotando,
aunque para ello dejemos al descubierto
nuestra mas pura vulnerabilidad por unos
instantes, vivir es arriesgarse... a que te
de el sol de pleno...puedes quemarte, es
una posibilidad bien es cierto, pero si no
dejas de estar sumergido...también...
es un riesgo...puedes ahogarte...
No hay corazas que no sean vulnerables, hay que seguir nadando o flotando, en este mar, llamado vida, donde a veces la marea parece atraparnos.
ResponderEliminarUn abrazo.